Agregó que "la cuestión excede las normas provinciales" porque "lo que está en juego es la Constitución" y "la vía para llegar es el recurso extraordinario", que representa la Corte Suprema nacional, luego de que se pronuncie la Corte Suprema provincial.
Incluso, recordó como antecedentes "la re-reelección de Gerardo Zamora en Santiago del Estero" y "un viejo caso que planteó el Colegio de Abogados de la provincia de Tucumán tras la reforma del 2006", casos que llegaron a la Corte Suprema de Justicia nacional pese a ser cuestiones provinciales.
Por eso, dijo, "no hay debate respecto si puede intervenir o no la Corte nacional", porque "se están invocando la afectación directa sobre la constitución y los tratados de derechos humanos".
Gil Domínguez admitió que si bien no hay ley local de acefalía en Tucumán, "hay poderes constituidos y funcionando, por lo que se aplica la acefalía implícitamente".
El constitucionalista dejó claro que "en caso que no se pueda resolver antes del 29 de octubre, el presidente de la Corte Suprema de Tucumán puede hacerse cargo transitoriamente" del gobierno "hasta que se resuelva la cuestión, e incluso prorrogar los mandatos".
Dijo también que "no están dadas las condiciones para una intervención federal", y subrayó que "está garantizada la república".
"Puede gustar más o menos el fallo, pero la República ha funcionado", concluyó el constitucionalista.
Fuente: Télam