Aguirre mantenía un duro cruce verbal con el grupo de quienes dijo “que no entienden” el reclamo, ya que el Gobierno ofreció un aumento salarial hace un mes, que recién se hará efectivo en el sueldo que se pague el mes próximo.
Este aumento fue considerado “una burla” por trabajadores, quienes intensificaron en las dos últimas semanas las medidas de fuerza que mantienen desde hace meses.
Apurado por las amenazas de renuncias masivas de personal jerárquico del Hospital San Juan Bautista, y tras conocerse el caso a nivel nacional por una nota publicada ayer por Clarín, Aguirre convocó cerca del mediodía a la titular de ese nosocomio, Noemí Villagra, y anunció la reunión para el jueves.
Gustavo Perea, referente del grupo, informó que la medida de fuerza no se levantará, y que sigue prevista la movilización para la noche del viernes.
En tanto, este miércoles habrá una asamblea en la que se analizará si se formalizan o no las renuncias anunciadas la semana pasada.
El paro de ayer resintió casi por completo la actividad en los consultorios externos y servicios ambulatorios del principal nosocomio provincial, situación que recién se revertirá el lunes próximo.
