El letrado, que con anterioridad había concretado una decena de presentaciones similares, manifestó que "los damnificados por CBI conforman un abanico que comprende, entre otros, a un hombre que había cobrado una indemnización; otro, que había vendido un auto, y una persona que comercializó una vivienda".
De acuerdo con Nayi, "se estaría frente a una maniobra defraudatoria a gran escala", dado que los ahorristas "entregaban a CBI dinero y, a los 30 días, debían recibir un interés del 27 por ciento anual sobre el saldo final".
El abogado subrayó que, no obstante, en los últimos meses, en vez de recibir dinero fresco, tal como habían pactado con CBI por medio de un contrato de mutuo, en la financiera les daban "cheques, de diferentes empresas, todos de procedencia dolosa o declarados como robados".
Por su parte, ayer, en la Justicia Federal, donde en forma paralela se investiga el origen del dinero con que operaba CBI, se había solicitado la imputación y detención del presidente de la financiera, Eduardo Rodrigo.
Rodrigo, según su propio abogado, Carlos Palacio Laje, abandonó Córdoba hace diez días cuando se enteró que el vicepresidente de la compañía, Jorge Suau (47) había sido hallado muerto en el interior de una camioneta.
"Rodrigo, que era la cara visible, el representante legal que comandaba la operatoria de CBI, fue denunciado por los delitos de estafa, que contempla penas de un mes a seis años de prisión; de asociación ilícita, que prevé penas de tres a 10 años (en caso de ser un organizador o un jefe el mínimo se eleva a cinco), y del delito contra el orden público y financiero, de uno a cuatro años", subrayó Nayi.
Nayi insistió en el mismo concepto: "CBI nació y funcionó en la ilegalidad, y terminó sorprendiendo en su buena fe a un centenar de personas, que confiaron sus ahorros", tras lo cual agregó que Rodrigo debe ser detenido, porque "no ha querido colaborar y, montándose en una mentira, ha tratado de eludir a la Justicia".
La alusión del letrado es el hecho de que, la semana pasada, Palacio Laje, abogado de Rodrigo, informó que su cliente se alejó de la ciudad de Córdoba al enterarse sobre la muerte de su socio, Suau, por temor a que pudiera pasarle lo mismo.
"Cuando se enteró sobre la muerte de su socio, entró en pánico y, tras recibir amenazas, decidió alejarse de la ciudad", explicó Palacio Laje, motivo por el cual ahora se desconoce el paradero de Rodrigo, aunque para éste, hasta el momento, no pesa orden de detención y captura.
CBI, dos de cuyas oficinas fueron allanadas la semana pasada, funcionaba sin autorización del Banco Central de la República Argentina (Bcra), según lo confirmó el propio fiscal federal Enrique Senestrari, a cargo de la investigación.
Mientras tanto, de acuerdo con los datos preliminares de la autopsia, Suau, que fue encontrado el jueves 13 del corriente dentro de su Toyota Hilux en la Ruta C45, cerca de la localidad cordobesa de Rafael García, falleció por haber inhalado monóxido de carbono.
Las pesquisas, a cargo del fiscal de Alta Gracia, Emilio Drazile, están orientadas a determinar si el fuego que se desató en el interior de la camioneta 4x4 fue provocado por el mismo Suau, o por otra u otras personas.
Fuente: Télam
