Brizuela del Moral puso a disposición del jefe de la Iglesia catamarqueña toda la colaboración necesaria, mientras que el Gobierno sigue analizando los daños producidos en monumentos históricos de la provincia, oficinas públicas, escuelas y viviendas particulares.
El obispo Miani anunció que en las próximas horas comenzará un recorrido personal y con la asistencia de colaboradores por todas las iglesias de la provincia para realizar un relevamiento de los casos que requerirán de asistencia más urgente.
Para Miani "se trató de un milagro porque por la intensidad del temblor y pensando en lo que ocurrió años atrás en San Juan, podría haber sido desastre. Así que dejemos vivir la realidad del milagro".
Por su parte, el gobernador remarcó que "podría haberse tratado de una catástrofe", y consideró que los efectos del movimiento sísmico fueron mitigados por la política provincial que en la década del 60 dispuso como obligatorias las construcciones antisísmicas".
Brizuela del Moral anunció que se reunirá la próxima semana con autoridades del gobierno nacional para presentarle un informe con el relevamiento por los daños.
Junto a Brizuela del Moral, en el obispado estuvieron el senador nacional Oscar Castillo y el referente kirchnerista, Armando "Bombón" Mercado.
Posteriormente, el gobernador se puso en contacto telefónico con la ministra de Desarrollo Social de la Nación, Alicia Kirchner, quien analiza la ayuda que se enviará a la provincia.