Este martes, el ministro de Finanzas de ese país, Wolfgang Schäuble, advirtió que "en la Argentina insultan a los fondos y los llaman ´buitres´, pero la causa del problema es la propia Argentina". Al respecto, el jefe de Gabinete señaló: "No es casualidad la opinión del ministro Alémán, porque su país siempre ha tenido una actitud hostil".
"Da que pensar por qué las grandes potencias no tienen una actitud firme contra grupos minúsculos. Pareciera que están cooptados por los grupos financieros y por fondos buitres que efectivamente condicionan su actitud, voluntad y expresiones", insistió.
Se espera ahora una reacción diplomática. El ministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timermann llegará al país en los próximos días luego de participar de la Asamblea General de las Naciones Unidas. El Canciller podría citar a representantes de Alemania en la Argentina para hacer conocer el malestar del Gobierno. La semana pasada se adoptó una postura similar con el Encargado de Negocios de los Estados Unidos, Kevin Sullivan, quien había hecho declaraciones vinculadas al default.
La escalada del dólar
Una vez más, el gobierno nacional insistió en que se trata de un mercado negro. El dólar libre alcanzó este martes un nuevo record, al cotizar a 15,45 pesos. Por eso, Capitanich fue consultado sobre por qué si es ilegal no se ordena la intervención de la policía. Su respuesta fue que para eso se requiere la orden de un juez. Para eso, llamó a fomentar que haya más presentaciones judiciales.
"Cualquier intervención de las fuerzas de seguridad debe ser con participación judicial previa. En ese contexto, lo que debemos afirmar categóricamente es que frente a denuncias concretas es necesario que actúen las fuerzas de seguridad en base a orden judicial expresa. Eso debe promoverse y propiciarse", indicó el jefe de Gabinete.
Como en cada ocasión, el funcionario insistió en que se trata de un mercado "especulativo" y pidió informar al público sobre toras posibilidades de ahorro. "Nadie puede pensar que este tipo de cambio que se pretende instalar sea una referencia para cualquier transacción. No se puede consentir", alegó.
Capitanich rechazó además el estudio que indica que las empresas prevén disminuir su personal porque se trata de una "manipulación absoluta de los datos" en el que se "pone como denominador una tasa de inflación absolutamente elevada que no se condice con ninguna metodología".
Capitanich aprovechó también para cuestionar al Grupo de los 6 (G-6), entidad que agrupa a las mayores cámaras empresarias, por recurrir a la Justicia para que declare la inconstitucionalidad de la nueva Ley de Abastecimiento: "Es una ley que ha sido mayoritariamente aprobada por el Congreso. Pretenden su invalidación vía judicial con una acción de inconstitucionalidad que carece de sentido".
"Lo que pretenden estos grandes grupos empresarios es castigar a los más débiles", disparó.
Fuente: infobae.com
