Además, reiteró que en el caso de la industria automotriz "no es homogénea" la situación en cada empresa y que "algunas no aumentaron precios y subieron sus ventas, mientras que otras aumentaron precios y ahora presionan al Gobierno para tener medidas excepcionales".
En ese sentido, el funcionario les pidió a esas compañía "cooperar para que haya progreso, no solo en lo económico" sino también para los trabajadores. E instó a "no pueden promover todo el tiempo acciones para poner en vilo la seguridad de los trabajadores para presionar al gobierno".
En el plano automotor, Capitanich destacó la reunión que mantuvo ayer la ministra de Industria, Débora Giorgi, con su par de Brasil, Mauro Borges, tras la cual se lograron "avances significativos", y adelantó que "en la próxima semana tendremos algunas novedades".
Los cruces entre Méndez y el Gobierno comenzaron el fin de semana, luego de que el industrial declaró en una entrevista que se necesitaba "un ajuste" por parte del Estado y que reduzca sus costos.
Ayer, tras la respuesta del Gobierno, Méndez increpó al pedir un análisis de costos. "Hagamos un análisis de costos. Yo se de eso porque trabajo de esto desde los 18 años. Veamos si se gana o no es así", afirmó.
"Si hay que ganar menos, hay que ganar menos", volvió a repetir y pidió nuevamente que también el Estado se siente en la mesa a discutir.
Más temprano, el jefe de Gabinete había defendido la política de subsidios que lleva adelante el gobierno nacional y señaló que "es importante que los dirigentes de la UIA opinen con razón y fundamento".
Fuente | ambito.com
