El ex presidente está procesado por el delito de defraudación por administración infiel agravada por ser en perjuicio de una administración pública.
Las sospechas sobre un supuesto pago de coimas por esta operación fueron dadas a conocer por la prensa de París y luego aportó detalles un financista francés que giró millonarias sumas de dinero a bancos de Estados Unidos a pedido de Thales.
Se trata de Lionel Queudot, dueño de la ex financiera suiza Finego, cuya declaración -incluida en el expediente- se realizó en la Embajada argentina en Berna.
Queudot dijo desconocer quién era el destinatario final del dinero, dio un pormenorizado detalle de las transferencias y advirtió sobre la estrecha relación que la firma tenía con Menem.
La causa fue archivada en 2003 por el entonces juez Jorge Urso, pero luego la Cámara Federal ordenó investigar el caso y el presunto pago de coimas, que se estiman en 25 millones de dólares, pero que nunca pudieron probarse.
El ex presidente quedó procesado entonces por supuesta administración infiel por el decreto con el que, en 1998, benefició a la firma Thales Spectrum. Aquel contrato fue suscripto por veinte años, pero el ex presidente Néstor Kirchner lo anuló en su gestión por incumplimientos de la empresa.
"No puede soslayarse de modo alguno que Carlos Saúl Menem, en orden al cargo detentado y en virtud de encontrarse bajo su exclusiva competencia todo lo relativo al control del espectro radioeléctrico, desconociera el desequilibrio existente entre la prestación brindada y la contraprestación percibida por TSA (Thales Spectrum) desde el inicio de la concesión, con el consecuente perjuicio que dicha situación ocasionaba al Estado Nacional", dice un párrafo de la resolución que en su momento dictó el juez Norberto Oyarbide
Sin embargo, por falta de pruebas el juez no lo encontró responsable del delito de cohecho (coimas), aunque la investigación por ese delito seguirá adelante.
Fuente: infobae.com