La jefa de Estado salió del aeroparque metropolitano, acompañada por todo su gabinete, poco después de que terminara el tradicional Tédeum que estuvo a cargo del vicepresidente primero del Episcopado, el arzobispo Luis Villalba, que pidió "pasar de un modelo de conflicto a un modelo de convivencia armoniosa, respetando las diferencias".
Al mismo tiempo, sostuvo que "la unión en pareja de personas del mismo sexo es naturalmente distinta a la unión de una pareja heterosexual a la que llamamos matrimonio" y señaló que "a realidades distintas corresponden en justicia denominaciones distintas, para no dar lugar a una apropiación indebida del concepto de matrimonio".
Sobre el mismo tema, Villalba dijo que la ley de matrimonio ley que consiguió media sanción de Diputados y se discutirá la semana próxima "está en juego una ley que pretende orientar la cultura del pueblo" y "el pueblo tucumano, perteneciente a diferentes credos religiosos, por abrumadora mayoría, expresó estar en desacuerdo con este proyecto de ley".
En otro pasaje, el religioso se refirió a la crisis de la dirigencia local al decir que ser competente "no es suficiente para vivir un compromiso social según auténticas reglas ética". A propósito del nuevo faltazo de Cristina, que dará un discurso después del mediodía, "no tenemos nada que decir, esto ya parece una costumbre", indicó un portavoz de la curia tucumana.
Diario: Perfil