Lo hizo durante un acto en la provincia de Entre Ríos para inaugurar viviendas, inaugurar obras y entregar computadoras a escuelas públicas.
“La redistribución del ingreso nos favorece a todos los argentinos”, dijo la jefa del Estado, y advirtió que “ningún sector puede quedarse con todo”.
“Si no hubiera sido por este mercado interno que se construyó desde el 2003, la crisis financiera global nos hubiera pasado por encima”, remarcó.
Esta mañana, al hablar en la Casa de Gobierno, Fernández de Kirchner había pedido al empresariado que “contribuye, en su carácter de formadores de precios” a alcanzar acuerdos que contemplen “los intereses de toda la sociedad”.
En el discurso que pronunció por la tarde en la localidad entrerriana de Colonia Avellaneda, la presidenta hizo entrega simbólica de las llaves a los nuevos propietarios de 192 escuelas en Concepción del Uruguay y 600 en Paraná.
A Colonia Avellaneda, ubicada a sólo 12 kilómetros de la capital provincial, Cristina Fernández, junto al gobernador local Sergio Urribarri, llegó a bordo de un tren de fabricación argentina.
Con ese viaje dejó formalmente inaugurada la línea interurbana que une a Paraná y Colonia Avellaneda. (