Y señaló: “No subestimo a la gente pero la mayoría de esa gente que quiere un cambio hoy está en silencio. Con Alfonsín nos animamos a unir parte del peronismo con el radicalismo, es hora de sumar más allá de la historia. Lo que viene es decisión de la gente y no de los dirigentes”.
En cuanto al inicio de la relación con candidato radical remarcó que “me convenció que quería ser presidente. Tiene una genuina vocación de poder. Invita a superar fronteras ideológicas y partidarias. No quiere volver a cometer errores en base a una organización que busca soluciones y consensos”.
Y aclaró para aquellos que critican esa alianza que “los hechos serán la garantía de la unión. La gente tiene esperanzas, los argentinos queremos volver a progresar. El progresismo es cuando las familias pueden progresar. Yo no soy de derecha ni de izquierda. El mercado tiene un rol importante pero el Estado debe estar presente”.
Sobre el socialismo resaltó que “va a ser testimonial. Dijeron si o no a De Narváez pero nunca criticaron ninguna de mis políticas públicas. Creo que la candidatura de Binner puede favorecer al gobierno”.
En relación al caso Schoklender y las Madres de Plaza de Mayo afirmó: “es gravísimo. La Presidente debe explicar a los argentinos porque ese gran cantidad de dinero se usa corruptamente bajo el paño de las Madres. Deben explicar el uso que hicieron del dinero. Hay responsabilidad de Hebe de Bonaffini por acción u omisión”.
Y en cuanto a la alianza entre Cristina Kirchner y Hugo Moyano aseguró que “sigue intacta, son socios. Moyano es un modelo que se agota. Es el gran enemigo de los trabajadores argentinos. El sindicalismo debe proteger a todos no solo a los sindicalisados. Con el tiempo Moyano va a ir preso porque tiene cuentas pendientes con la Justicia. Moyano necesita los fueros por eso quiere estar en las listas y no me extrañaría que encabece las listas de diputado”. (Infobae)