Darwina, de 84 años, ferviente defensora de los derechos humanos y referente de los organismos sociales de la ciudad de Rosario, trabajó incansablemente desde 1977 en la búsqueda de su hija Stella Maris, desaparecida durante la última dictadura militar.
Sus restos son velados en la Casa Caramuto, Córdoba 2936, cuidad de Rosario, provincia de Santa Fe.(Telam)