"No estoy dispuesto a darle entidad a esta estupidez", dijo hoy el funcionario kirchnerista, en una entrevista con C5N, sobre uno de los cables que lo involucran. En el documento difundido hoy, de septiembre de 2009, los diplomáticos estadounidenses indican que Aníbal está "rodeado por rumores de corrupción" y "vínculos con el narcotráfico", pero enseguida se atribuyen esas versiones a "prensa no confiable e informes de inteligencia".
En el reportaje, el jefe de los ministros aseguró sobre el escándalo por WikiLeaks: "Este es un problema del gobierno de los Estados Unidos y no nuestro. No estoy dispuesto a darle entidad a esta estupidez. Ellos [por el país norteamericano] van a tener problemas con todo el mundo tras la difusión de estos documentos".
Por otra parte, consideró que las evaluaciones que se hicieron sobre él "de grave no tienen nada" dado que "si fueran graves, en dos años y medio, todo lo que se dice tendría que haber tenido consecuencias lógicas".
Al ser consultado sobre los rumores mencionados acerca de vínculo con el narcotráfico, contestó: "A mi me tiene sin cuidado. Uno sabe lo que está hacendo. Nuestra administración a partir del 20 de agosto de 2004 por instrucción de Kirchner y de la actual Presidenta fue el único gobierno argentino que detuvo bandas de narcotraficantes como nadie".
Fernández consideró que "la realidad de lo que se está contando es lo que Googleó [algún funcionario] de alguno de esos portales tiramerd". "Uno se siente defraudado", concluyó sobre el funcionario que difundió el informe.
En tanto, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, aseguró que no conoce "el origen ni la dinámica de cómo surge esa información", en referencia a los cables difundidos por el diario El País.
Además, Scioli negó que Aníbal Fernández le haya aconsejado que no se metiera con el narcotráfico, según aseguraría uno de los documentos filtrados por WikiLeaks. "Eso es inverosímil porque me consta el compromiso a nivel nacional con el tema de la droga", sostuvo.
En esa línea, el ex vicepresidente advirtió: "No soy una persona influenciable, de mi sólo esperen una persona previsible y confiable".
"No soy de correr detrás de los dimes y diretes , me concentro en mi trabajo y siempre tomo decisiones con responsabilidad y pensando lo mejor para el país", reiteró.
Sin menciones. En tanto, Cristina Kirchner volvió a aparecer en público y a eludir el escándalo por la filtración de los cables secretos del Departamento de Estado de los Estados Unidos.
La Presidenta encabezó un acto en la Casa Rosada para anunciar el pago de un plus de 220 pesos a quienes cobran pensiones graciables y el pago de asignaciones a trabajadores temporarios durante todo el año.
Nada dijo del escándalo que provocó la difusión de más de 250.000 documentos reservados obtenidos por el sitio WikiLeaks. Hasta ahora, sólo habló del tema, de manera escueta, el ministro de Economía, Amado Boudou.
Ayer, en el programa kirchnerista 678, Amado Boudou cuestionó el contenido de los cables que contienen duras definiciones sobre la Argentina y sobre los Kirchner. Sostuvo que la filtración de los cables es "una vergüenza para los Estados Unidos, pero no para la Argentina". Además, opinó: "No es éste el corazón de las investigaciones norteamericanas; esto tiene un alto nivel de pavadas". (Diario Panorama)
