Barros alegó que a pesar de que se cumplió la medida de fuerza, los trabajadores municipales mantuvieron las guardias básicas en los servicios que presta la comuna, considerando que por lo tanto no corresponde que se descuenten los días de paro.
El dirigente advirtió que dadas las condiciones actuales podrían realizarse nuevas medidas de fuerza.
En un primer momento, la municipalidad había anunciado el descuento de todos los días de paro -durante 20 días entre junio y julio-, y la imposibilidad de acceder al incremento aprobado por el Concejo Deliberante.
Luego, la comuna suavisó el castigo y decidió descontar sólo los días no trabajados a partir de que la Dirección de Trabajo declaró ilegal la protesta, es decir el 1 de julio.
Como el paro se inició el 18 de junio, la mayor parte de los días de paro serán abonados normalmente.
A los empleados que no se sumaron al reclamo, les corresponde cobrar el incremento del incentivo por productividad de junio. Este adicional se hará efectivo a fines de este mes o en los primeros días de agosto.