Pasado el mediodía argentino, el Sumo Pontífice se comunicó con Alicia Barrios para desearle un feliz cumpleaños. Entonces, la reconocida periodista aprovechó el estrecho vínculo que la une con Bergoglio para consultarlo directamente sobre la noticia:
-Jorge, ¿viste la tapa de los diarios? Voy a tener que ir a Roma porque estas llamando para retarlos a todos...
-¿Por qué? Acabo de levantarme de la siesta. Leeme, ¿qué pasó?
-Dice que convocaste a una reunión para el 19 de marzo por la crisis.
-No, eso no es cierto, no, no no... Es un disparate. Esperame que voy a buscar mi agenda.
Tras resumir la conversación con Su Santidad, Alicia Barrios apuntó: "Me fue desmintiendo puntualmente todo lo que había salido en los diarios. Se puso muy mal, se apenó mucho y después me leyó su agenda día por día hasta el 19 de marzo".
En ese contexto, la periodista detalló que el Papa le hizo una sugerencia: "Venite con Pignanelli y Corral para hablar de la educación". "Después seguimos hablando de otras cosas, nos divertimos mucho, lo saqué de tema porque sabía que lo estaba afectando", describió en declaraciones a Radio Del Plata.
En definitiva, nada había en la agenda del Papa sobre una supuesta reunión con los representantes argentinos ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT): el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada; el vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Daniel Funes de Rioja, y el titular de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra), Gerardo Martínez.
Además, Barrios aprovechó la entrevista para aclarar que Francisco siente "un enorme respeto" por Cristina Kirchner: "Tiene una muy buena relación con la Presidente, mal que les pese (a los opositores)".
Para cerrar el tema y terminar con las especulaciones sobre la influencia del Papa en la política local, la periodista señaló: "Él escucha todo, es una oreja caminando, pero no emite opinión".
Fuente: infobae.com
