Luego de la lucha encabezada por el pueblo de Tilcara, Huella, Yacoraite y Maimara, el gobierno pretende emprender un ataque desde el parlamento con la aprobación de alguno de los proyectos en danza. Ha quedado demostrado que existe un "bloque legislativo multipartidario común" a la hora de privatizar, concesionar o subsidiar al empresariado saqueador en la provincia. Para esto se asegura el copamiento de cualquier iniciativa de lucha a través de la burocracia de la CTA y otras organizaciones cooptadas.
La experiencia popular en torno a la minería data de los despojos dejados por las minas Pan de Azúcar y Metal Huasi, que suman al saqueo la contaminación (suelo, agua y aire) que produce enfermedades incurables. Utilizan el método de explotación a cielo abierto, con voladura de cerros completos, a pesar que las zonas de la Quebrada y Punade fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Ni hablar de las comunidades originarias despojadas de sus tierras, primero por el turismo y ahora por la minería, que siguen en la eterna espera de la entrega y titularización de sus tierras.
Los antecedentes de ayer y hoy exigen la unidad de todos los que se oponen al saqueo y contaminación mineros en la zona de la Quebrada y Puna. Al saqueo minero, se le debe oponer la movilización independiente por:
* Fuera la minería de la Quebrada y Puna.
* Erradicación de los desechos tóxicos en Abra Pampa e indemnización de sus víctimas.
* Comisión de control de trabajadores, vecinos y organizaciones ambientales de las explotaciones mineras radicadas en la provincia.
* Impuestos progresivos a toda empresa contaminante.