El porcentaje de mejora de los empresarios se encuentra lejos del 41 por ciento de aumento que pretende la CGT, por lo que será el Gobierno el que deberá conciliar las dos posturas.
La semana pasada, desde el sector empresario se rechazó la cifra propuesta por los dirigentes sindicales por considerar que hay sectores que no podrán hacer frente a ese incremento.
La central obrera pretende elevar el haber mínimo, que está en 1840 pesos, a 2.400 pesos.
Por su parte, el titular de la Cámara Argentina de la Construcción, Carlos Wagner, dijo que "hay que ver qué nivel de salario mínimo está en condiciones de pagar la economía argentina en la actualidad".
"Un aumento del 41 por ciento se encuentra por encima de lo que han pactado los gremios más importantes en las últimas negociaciones colectivas", afirmó el directivo.
Asimismo, indicó que "es necesario segmentar por zonas, principalmente el NOA y el NEA" y añadió que "hace tiempo que se habla de ello, pero nunca se ha podido implementar".
Por su parte, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) reclamará una agenda social de los trabajadores, que no sólo comprenda el salario sino también la modificación del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias y un aumento en la Asignación Universal por Hijo. (Diario Uno)