En Aerolíneas se distribuían 6.000 ejemplares del matutino, a pasajeros de la primera clase y ejecutiva. Clarín era comprado por la empresa, en tanto que el otro, se distribuía de forma gratuita.
Cuando los camiones de ambos diarios llegaron al Aeroparque Jorge Newbery, la respuesta habría sido: "Tienen que hablar con la dirección de la compañía". Desde la empresa aseguraron que se trataba de un programa de ahorro.
"Por un lado, estamos tratando de bajar el peso de los aviones, y por eso se está reduciendo la cantidad de publicaciones a bordo", señalaron. "Por otro lado, la factura por la compra de diarios era elevada", agregaron. Lo insólito es que La Razón es gratuito.
Fuente: Asteriscos TV