El enfrentamiento entre Jalile y la oposición en Valle Viejo alcanza ribetes cada vez más grotescos. El intendente se niega a que el Concejo controle la administración de la comuna, en tanto que los concejales opositores proporcionan la cobertura política para que Stella Ramos, que tiene varias causas pendientes en la Justicia e incluso está procesada en una de ellas, continúe aferrada a su banca. Ocurre que si Ramos dejara el cargo -ya hay un conflicto de poderes planteado en la Corte por Chazarreta para destituirla- la oposición perdería la mayoría calificada para avanzar en contra de Jalile.