"En Plaza de Mayo no hubo más de 20.000 personas", aseguró Aníbal Fernandez en diálogo con Radio 10, quien además criticó que el "Grupo Clarín fue el principal gestor de este movimiento".
Por otra parte, denostó severamente el contenido de la marcha y las proclamas que calificaban de manera peyorativa -consignas como "yegua", o "que se muera"- a la presidente Cristina Kirchner. El senador rechazó que fueran infiltrados aquellos que lanzaron los insultos contra la mandataria.
"El nivel de odio que exhibió esa manifestación no es saludable", afirmó.
El senador oficialista acrecentó de esta manera la intensidad de los dardos lanzados contra la movilización protagonizada contra el gobierno nacional. En un principio, tomó una posición más moderada y calificó la marcha de "importante". Con el transcurso de los días, modificó esta interpretación y desestimó el número de adherentes a la protesta. infobae.com