“Déjennos trabajar por Catamarca” pidieron al oficialismo los dirigentes del interior, ante la falta de participación que se da a los afiliados en las decisiones partidarias y en la discusión de las políticas de gobierno.
Gigantino, por su parte, fustigó la resolución adoptada por la Convención Provincial de la U.C.R. reunida el viernes pasado, por cuanto “ya ni siquiera se espera la convocatoria oficial a elecciones provinciales, para poner en manos de unos cuantos la distribución de candidaturas, vulnerándose de esta forma, una vez más, la soberanía de los afiliados para decidir sobre las candidaturas a cargos públicos, haciendo tabla rasa de la democracia interna”.
“Lo que la Convención ha resuelto es un mamarracho, como cuando se dispuso hacer alianza con el kirchnerismo. Ahora todos se lamentan y se rasgan las vestiduras y el que sigue sufriendo las consecuencias es el pueblo de Catamarca”, agregó.
Por otra parte, el plenario resolvió constituir una Mesa Política con representantes de todos los departamentos y de la juventud. Con Renato Gigantino a la cabeza, la Mesa quedó constituida por: Jovi Vega (Ambato), Jesús Reales (Andalgalá), Ariel Cordero (Ancasti), Ivanna Jofré (Belén), Susana Trujillo (Capayán), Luís Cárdenas (Capital), Oscar Salas (Fray Mamerto Esquiú), David Zerdán (La Paz), Mario Vásquez (Paclín), Ricardo Chayle (Pomán), Ana Gigantino (Santa María), Juan Aredes (Santa Rosa), Daniel Altamirano (Tinogasta), Mauro Orellana (Valle Viejo) y Juan Guerrero (Juventud).
Con posterioridad, se aprobó un documento de fuerte contenido político, donde el sector hizo una convocatoria a la reconstrucción del partido a partir de sus ideales fundacionales y criticó a la conducción local de la U.C.R. por sus decisiones erráticas, alejadas de los principios que viene sosteniendo el radicalismo desde sus orígenes.
Finalmente, se entregaron reconocimientos a correligionarios del interior que cumplieron 50 años de afiliados a la U.C.R.. Recibieron su homenaje René Lesta (San Antonio de La Paz) y Ramón Rogelio Aragón (Piedra Blanca, Fray Mamerto Esquiú). También se homenajeo a dos dirigentes de la Capital: Ramona Soria y Carmen Salvo, por su larga militancia y compromiso con los ideales y la doctrina radical.
