Incorpora además a la enseñanza del “Himno a Catamarca” en todos los niveles de educación, dependientes del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología y establece como autoridad de aplicación a dicha cartera.
“Hablar de autonomía, es hablar de libertad; de derechos, de igualdad. En este sentido, nuestra provincia ha dado un paso importante en estos temas al haber realizado la presentación oficial de la bandera de Catamarca, la que nos identifica, desde el pasado jueves, ante nuestro país y el mundo”, señalan los fundamentos del proyecto promovido por Grimaux.
Advierte sin embargo que “esta emoción y alegría que aun nos invade, por las celebraciones de este magnifico acontecimiento histórico para Catamarca merecen, además, estar acompañada de otro paso significativo como lo es el reconocimiento, mediante instrumento legal, de la letra y músico del himno a Catamarca”.
Señala además que “es entendible que, al no existir un modelo de bandera se haya llamado a concurso para seleccionar la que reúna los requisitos que se consideraban necesarios debía contar la enseña provincial”. Pero advierte que “este no es el caso del Himno a Catamarca, ya que en cada acto, que año a año se desarrolla a lo largo y ancho de la provincia se entonan sus estrofas sin estar aun reconocido legalmente”.
“Podríamos incurrir en un acto de gran injusticia, ya que a estas alturas, en las que se entona la emoción de sus versos representativos de toda la geografía provincial, en actos institucionales, aun no haya sido reconocido mediante su debido instrumento legal”, indica a la vez que insiste en que “usualmente las leyes son establecidas de manera que concuerdan con las costumbres de las sociedades que rigen, y en defecto de ley, los usos y costumbres pueden constituir además, una fuente de derecho determinante”.
“Expresar con sinceridad nuestro reconocimiento a los autores de este himno, es en definitiva, valorar en cada verso a nuestra tierra, a nuestro pueblo, a nuestra gente, que celebramos nuestra autonomía, y resaltamos la pertenencia a nuestro suelo catamarqueño”, afirma Grimaux en los fundamentos del proyecto al que el Senado dio media sanción esta mañana.
El texto y la música del “Himno a Catamarca”, fue creado en el año 1.978 y a partir de 1.987 se lo empezó a cantar en forma continua en los actos de la Autonomía de Catamarca, en cada 25 de agosto.
Hasta 1987, no existía un tema de similares características en este género. Con letra del profesor y escritor Guillermo Gervan Varela y música del maestro José Moltó fue interpretado a través de los años, cada 25 de agosto.
“El himno rescata el valor de la identificación con el paisaje, con costumbres y tradiciones, con poetas y artesanos, con la devoción mariana, con el Padre Esquiú, con las características propias de cada uno de los dieciséis departamentos. todo con legítimo orgullo de ser catamarqueño. Merece además que reconozcamos a sus autores por el valioso aporte realizado a la cultura de nuestra provincia, pero sobre todo la contribución a afianzar nuestro patriotismo local”, insiste Grimaux en sus fundamentos.