En cambio, si estuviera “suspendida”, debería darse continuidad al orden del día establecido para el sábado 11 y proseguir con los 87 convencionales inscriptos. Con esos mismos actores, renovadores y celestes estarían en serios problemas para conseguir los tercios (73 votos) necesarios para aprobar la regla de la excepcionalidad (mesa chica de la UCR para elegir el candidato a diputado nacional) y el artículo 29º de la Carta Orgánica partidaria, que hace referencia a la autorización al partido para constituir alianzas con frentes y otros partidos. En estas condiciones, el oficialismo partidario solo cuenta con 72 votos, mientras que el MIRA posee los restantes 15. Desde las matemáticas, sería imposible que renovadores, celestes y rojos lograran su cometido, salvo que algún militante del MIRA torciera su voto.
Sin embargo, para los renovadores, no hay tema de discusión al respecto, ya que consideran que la Convención pasada quedó concluida por falta de quórum.