A las horas de espera se suman los cupos impuestos por las empresas a la hora de cargar los tanques. En algunas estaciones, se venden naftas hasta los 100 pesos, aunque puede encontrar otras en los que el monto asciende a los 150.
La venta por cupo alcanza también a los motociclistas, que muchas veces deben conformarse con cargar hasta 15 pesos. Hay quienes cargan bidones para evitar, en el futuro inmediato, hacer otra vez las colas.
Empresarios del sector aún desconocen cuándo se normalizará la situación y no descartan aumentos en el precio. En ese sentido, la petrolera Shell realizó un ajuste del 1% en el valor del litro de nafta premium, la que llevó desde $ 5,997 hasta $ 6,049. En los últimos tres meses los combustibles ya llevan un incremento en el precio de más del 15% promedio, con picos del 20% (tal es el caso de la ultra de Petrobrás, que subió desde $ 5,199 que costaba en marzo hasta $ 6,229 en la actualidad).
Desde la Cámara de Expendedores de Combustibles de Santiago del Estero se informó que se hacen continuas consultas a las petroleras sobre la posibilidad de nuevos incrementos de precios, en donde la respuesta es “por ahora no”. Sin embargo, se especula que de mantenerse esta situación y las empresas se vean en la obligación de importar combustible –a un precio mucho más alto, ya que en la Argentina los valores actuales están subsidiados-, las subas continuarán. (Diario Panorama)