La bella ex modelo, que grabó las conversaciones que sostuvo con "Il Cavaliere" y tomó fotografías de sus encuentros íntimos, apareció en el hotel Excelsior del Lido con un elegante traje largo y zapatos altos, suscitando la curiosidad de fotógrafos y reporteros de todo el mundo.
Tras ser reconocida por el público, firmó autógrafos y repartió sonrisas como una estrella de cine.
"Si la llegada de la señora D´Addario es el hecho más importante de La Mostra, quiere decir que ese certamen de la cultura internacional dejó de ser la isla pura que no había sido contaminada por el cambio ineluctable que sufre Italia", comentó el diario "La Repubblica".
Fuera de competencia
"Lo más interesante como tendencia no está en estos festivales", aseguró el productor y realizador Pere Portabella, que este año preside en el Festival de Venecia la sección Horizontes, enfocada a las nuevas tendencias cinematográficas. "Además, ese cine interesante circula por otros circuitos, como los museos de arte contemporáneo, universidades o cines especializados", añadió el realizador.
A Portabella nunca le gustó hacer de jurado, pero aceptó ir al certamen porque se iba a presentar también "Mudanza", un homenaje a Federico García Lorca a través de un corto de 20 minutos de duración en el que unos profesionales de la mudanza vacían su casa- museo en en la Huerta de San Vicente, en Granada, donde el escritor solía pasar sus vacaciones familiares.
Con más de 80 primaveras cumplidas, Portabella es el único cineasta español del que el Museo de Arte Moderno (MoMA) de Nueva York y el Pompidou en París han mostrado su obra. (DPA)
Fuente: La Gaceta