En octubre de 1998, después de ser despedida, la mujer inició una serie de denuncias en las que involucró a Yoma, a Menem y a distintos funcionarios del Ejecutivo Nacional de entonces, a quienes acusó de participar de una red de complicidades y negocios ilegales.
Las declaraciones de Di Natale fueron un aporte fundamental para la condena de su antiguo jefe en la causa que investigó el tráfico ilegal de armas, que incluyó la voladura de la fábrica de armas de Río Tercero.
Pocos días antes de comparecer ante la justicia, el 1º de marzo de 2003, Di Natale fue hallada muerta en un patio interno del edificio de departamentos en el vivía en Barrio Norte.
Las pericias posteriores, realizadas recién tres años después demostraron que la ex secretaria de Yoma cayó al vacío desde una altura de 10 pisos, a un lugar en el que las reconstrucciones demostraron que ninguna persona podría llegar si no era arrojada por otro individuo.
La causa permaneció caratulada como suicidio hasta que en 2008, tres años después de la muerte de Di Natale, la Sala Cuarta de la Cámara de Apelaciones ordenó reabrir el expediente y designó a Palmaghini al frente de la investigación, quien a pesar de las dudas en torno al deceso de la mujer finalmente concluyó que se trató de un suicidio.
Ayer, en la segunda carta abierta referida a la muerte de Nisman, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se mostró "inquieta" ante la noticia de que Palmaghini es quien quedó al frente de la investigación por el deceso del fiscal.
"Lo que más me inquieta es que es la misma jueza que trató la causa del 'suicidio' de Lourdes Di Natale, ex secretaria de Emir Yoma, quien lo denunció por pago de coimas y fue una figura clave en la venta ilegal de armas. La causa se cerró y Lourdes sigue 'suicidada', escribió Cristina.
Fuente: Télam
