Respecto a la posibilidad de internas en el seno partidario, precisó que “se debe tratar de consensuar y hacer una sola lista; hay que pensar que el enemigo es uno solo: el gobierno incapaz que tiene Catamarca; yendo a otras provincias uno se da cuenta que Catamarca no existe; hay 100.000 personas que no votaron el 11 de marzo”.
Sin embargo, Barrionuevo esgrimió que “ni un minuto le preocupa el tema partidario en la provincia, yo en las elecciones pasadas saqué más votos que muchos de los que me critican y no voy a discutir con compañeros que no tienen nivel para discutir de política”.
Visiblemente ofuscado, anticipó que “no voy a perder tiempo con lo que digan algunos dirigentes en Catamarca, por eso estoy trabajando y apoyando a Fernando Juri en Tucumán y voy a estar firme el 29 en la mesa de debate minero convocada por el obispo Miani”.
Respecto a la opinión del secretario General de la Federación de Empleados de Comercio de Argentina, acerca de que Barrionuevo debería vivir en Catamarca, éste respondió que “si Cavalieri me mantiene económicamente, viviría en Catamarca y podría sacar el 37 por ciento de los votos -luchando contra el poder de la Nación , contra los medios, contra los dos millones de dólares que le dieron las mineras al Gobierno, contra los empresarios aceiteros que pusieron plata, contra el aparato santiagueño”.
Dijo que no se va a acercar a la coalición de Lavagna con un sector de la UCR porque es peronista y no saca los pies del plato, “Duhalde no va a apostar a Lavagna y sigo pensando que el candidato a presidente va a ser Kirchner”. Respecto a la alianza FCS-FPV pronosticó que “se empezará a romper cuando se toquen las cajas de Salud, Obras Públicas, la minería, que son todas coimas”.
Finalmente consideró que no ganó las elecciones del 11 de marzo porque ofreció trabajo, “porque quería una provincia distinta, por eso no voy a ser más candidato a gobernador; sólo quiero ser congresal por mi provincia”.