Clarín y La Nación pretendían que la conformación fuese a la inversa, un representante del Estado y dos de los privados.
Para evitar que se llevara a cabo la votación con la que se buscaba cambiar la composición de ese órgano de control, Moreno, quien representa al Estado, exhibió guantes de box y cascos, y advirtió: "Acá no se va a votar nada de lo que quieren los accionistas privados y nos bancamos lo que haya que bancarse".
Inmediatamente, el interventor judicial coadministrador en Papel Prensa, Martín Arecha, suspendió la asamblea "por desorden".
Fuente: Telam