El Secretario de gobierno de la Municipalidad de la Capital, Pablo Maggini fustigó esta mañana a los vendedores ambulantes acusándolos, de incumplir el convenio con ese organismo, anticipando que las negociaciones no les serán favorables, en esos términos
Lejos de mediar con la otra parte litigante, el funcionario acusó a los vendedores de autorotularse una denominación que no se corresponde con sus actividades. Indicó que los vendedores no son ambulantes, sino que tienen puestos fijos en las calles, y son parte de la competencia ilegal para los comerciantes que tributan respectivamente al Estado.
Las declaraciones del Secretario, no fueron para nada amigables, y por el contrario tuvieron cierta hostilidad para los vendedores que tampoco piensan retroceder en sus reclamos.
Maggini descalificó a los vendedores ambulantes de esta ciudad, endilgándoles incumplimiento del convenio celebrado con el organismo que representa. Se trata del acuerdo con la anterior gestión en la que se decidió alquilar un local en calle Rivadavia para la ubicación de todos los vendedores de calle, hasta tanto se acondicione el predio de la vieja Estación de trenes, para la instalación de locales comerciales.
Por la animosidad del funcionario, puede deducirse que las soluciones del conflicto están mas allá del 31 de febrero, que es la fecha en que vence el contrato de locación del local de la peatonal. Es también la fecha en que los vendedores se trasladarían a la nueva Feria de los ambulantes, según este acuerdo. Pero, no es difícil inferir que el Secretario de Gobierno, quiso madrugar a los vendedores, antes que éstos les reprochen la inexistencia de la obra prometida en el predio mencionado, a tan pocos días vista de la conclusión del convenio.
Pero no solo desestimó la actitud de los trabajadores de la calle, de abandonar el puesto de venta alquilado por la Municipalidad, sino que corrigió al igual que un maestro normal, la denominación ambulantes
