El proyecto de ley, que está siendo analizado por las comisiones de Cultura y Educación y Legislación General, contempla que en el diseño de sellos, timbrados y documentos oficiales se incluyan, cuando su característica lo permita, guardas, orlas, grecas, dibujos u ornamentos pertenecientes a alguna de las culturas aborígenes desarrolladas en nuestra provincia. A su vez establece que la Dirección Provincial de Artesanías llevará a cabo las tareas de asesoramiento que sean necesarias para la puesta en práctica de la iniciativa, que es impulsada por el diputado Rubén Manzi (FreGen).
Según especificó el legislador el proyecto“es reflejo sintetizado de un cúmulo de anhelos de quienes trabajan, piensan, crean, investigan y aportan en pro de un camino conducente al encuentro con nuestra verdadera y legítima identidad, donde estén plasmados todos los elementos que constituyen la amalgama de nuestra sociedad”, y destacó que“en nuestra identidad existe un elemento básico, fundamental y genético de la actual sociedad catamarqueña, que es sin lugar a dudas el aporte aborigen con todos sus misterios, su mística y sus riquezas”
“Catamarca, desde su nombre, sus costumbres, su lengua, comidas, vestimenta, música y en su folklore manifiesta ese importante componente aborigen que lucha por ser ampliamente reconocido y asimilado con toda su vitalidad”, añadió.
Manzi, señala en esta misma línea que“una de las manifestaciones aborígenes más nutridas y desarrolladas fueron las artes, en ellas nuestros antepasados dieron rienda suelta a su ingenio, creatividad e inteligencia, puestas al servicio tanto de su vida espiritual como material”, y remarca que los diseños de las distintas culturas“que se desarrollaron en nuestra "Fortaleza de la Falda" gozan de una delicadeza indescriptible y de una fina simplicidad en su composición, que nos muestran el elevado nivel que alcanzó su arte, fruto de una profunda espiritualidad”
Asimismo, sostiene que el arte aborigen“es una de las riquezas que tenemos los catamarqueños, pero es de esas riquezas que necesitan de nutrientes permanentes, no es estático sino que, por el contrario, precisa nuevos condimentos, aportes, ideas, técnicas etc. que le dan vida y no permiten que el arte muera, y nadie mejor para dotarlo de esos condimentos que nuestros niños y jóvenes con toda su sangre nueva, revitalizadora y creativa. Así es considerada por todos los países del mundo y por ello lo muestran como una carta de presentación ante visitantes y anfitriones”
Finalmente, el legislador considera que la iniciativa presentada“sería un importante avance en el camino de rescate cultural hacia el encuentro de nuestra identidad y desde nuestras raíces afianzar nuestra proyección futura”