El gobierno lanzó un plan de saneamiento financiero de la obra social estatal (APOS), resistido, y uno de los principales centros médicos privados está al borde de la quiebra y amenaza con dejar en la calle a casi 200 trabajadores.
La Asociación de Trabajadores de la Sanidad de La Rioja (ATSA) impulsó una jornada de protestas callejeras con una "marcha de antorchas", en defensa de las fuentes de empleo en clínicas y sanatorios que prestan servicios a la APOS. (Télam)