Catamarca
Jueves 25 de Abril de 2024
Buscar:

Radicalismo popular: la vieja antinomia se diluye

La audaz participación de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en carácter de "militante" en el congreso de una fracción radical disidente, se convirtió el jueves pasado en una nueva muestra de la flexibilización de una antinomia que marcó a la política argentina durante 70 años.
La presidenta peronista cerró el congreso del radicalismo popular que lidera el ex legislador Leopoldo Moreau, en el que los militantes alfonsinistas sellaron una "alianza estratégica" con el Frente para la Victoria (FPV), que podría traducirse en la participación de radicales en las listas oficialistas.

Moreau calificó el audaz gesto de Cristina como "extraordinario", lo cual da cuenta de que constituye en verdad una innovación en la política nacional signada por la vieja antinomia peronismo-antiperonismo.

Con todo, la audacia de Cristina no implicó un gesto forzado, sino natural, porque la contradicción fundamental no es hoy peronismo versus antiperonismo, sino popular versus antipopular.

El presidente de la UCR, Ernesto Sanz, gestor de un acuerdo con los conservadores de Pro, advirtió que Moreau podría ser expulsado del partido, pero su correligionario Eduardo Santín, que participó del congreso alfonsinista, replicó que "las autoridades partidarias ya han expulsado a millones de radicales al firmar un acuerdo con Mauricio Macri".

Santín puso el dedo en la llaga que abrió el acuerdo cupular de Gualeguaychú, al señalar que con la alianza conservadora "sólo se llevaron la sigla partidaria".

La dirigencia radical tiene ahora la obligación de contener a buena parte del electorado boina blanca que no termina de digerir a Mauricio Macri.

El acuerdo de la UCR con el Pro y la Coalición Cívica (CC) huele a una reedición del antiperonismo gorila, aunque en realidad apunta contra el modelo instaurado por el kirchnerismo.

En cambio, una franja del radicalismo progresista cree que la contradicción fundamental pasa hoy por la defensa de los intereses nacionales y populares.

La presidenciable Margarita Stolbizer -precandidata del acuerdo entre Generación para un Encuentro Nacional (GEN), Libres del Sur y el Partido Socialista- aspira a realizar una buena elección con entre 10 y 15 por ciento de votos provenientes de radicales disconformes con el pacto de Gualeguaychú.

Si a ello se suman votos de radicales disidentes al FPV, las aspiraciones presidenciales de Macri podrían quedar averiadas, ya que el presidenciable del FPV podría sacarle los diez puntos de ventaja que necesita para evitar el balotaje.

Desde el nacimiento del peronismo en 1945, dirigentes del radicalismo se sumaron al movimiento de Juan Domingo Perón en reconocimiento de la raigambre común como partidos nacionales y populares.

Raul Alfonsín fue catapultado a la Casa Rosada en 1983 con votos peronistas y el kirchnerismo se nutrió desde su nacimiento con sufragios radicales.

Son muestras de que las camisetas partidarias ya no identifican plenamente la pertenencia política, pese a que subsista enclenque la vieja antinomia.

El radicalismo puso históricamente el acento discursivo en la defensa de las instituciones, pero los peronistas les achacan la participación de dirigentes de boina blanca en el golpe de estado de 1955.

El peronismo fue históricamente el partido de la movilidad social ascendente y propulsor de la justicia social, pero el gobierno democrático de Carlos Menem, surgido del PJ, profundizó como ninguno la desigualdad y la exclusión.

La presidenta reconoció ante los radicales el jueves pasado que el peronismo reivindicó realmente el valor de las instituciones democráticas recién después de la sangrienta experiencia de la última dictadura cívico-militar.

Al llegar al gobierno, Kirchner no apeló a la iconografía peronista para autodefinirse, sino que rescató sus mejores tradiciones: crecimiento, inclusión social, empleo, y redistribución del ingreso. Pero sumó además el respeto por la institucionalidad.

La vieja contradicción quedó entonces tan diluida que dirigentes de la derecha del Partido Justicialista se alejaron del FPV y se sumaron a la fuerza conservadora del Pro, o intentan reagruparse para enfrentar al oficialismo peronista.

El mapa ideológico, que asoma aun borroso, parece apuntar a lo que en su momento imaginó Kirchner: un polo de centroizquierda y otro de centroderecha. Pero más allá de los rótulos, la pelea siga siendo la misma: un país para las grandes mayorías o un país para pocos.

Fuente: Télam

(Se ha leido 143 veces.)

Se permite la reproducción de esta noticia, citando la fuente http://www.diarioc.com.ar

Compartir en Facebook

Más Noticias:

28-03-2021 Asumieron las nuevas autoridades del Partido Movilización
15-11-2019 Encuesta: la mayoría cree que Vidal relevará a Macri en el liderazgo de Cambiemos
27-09-2019 Sólo el 18% cree que Macri puede reducir la ventaja que le sacó Alberto Fernández en las PASO
15-09-2019 Proponen que el Estado no celebre concursos de belleza
02-05-2019 Denett criticó a Carrió por señalar a Catamarca como parte de una ruta de droga
10-04-2019 La senadora Blas participó de la reunión con Lavagna
09-04-2019 Secuestran ciento cuarenta y cinco vehículos en puestos camineros de Ambato, Valle Viejo, Capayán y Capital
04-04-2019 El peronismo de Paclín trabaja de cara a las elecciones
31-12-2015 "Hoy termina la guerra contra el periodismo"
28-12-2015 DECLARACIONES EN TWITTER | Aníbal Fernández: “Tienen que aparecer vivos los prófugos”

Sitemap | Cartas al Director | Turismo Catamarca | Contacto | Tel. (03833) 15 697034 | www.diarioc.com.ar 2002-2024