De esta manera, como le gustaba decir, el ex presidente ganó las elecciones "con más desocupados que votos", pero en los primeros nueve meses de gestión bajó nueve puntos la desocupación y su popularidad se multiplicó.
No le fue fácil igualmente: a poco de asumir se vio obligado a impulsar una renovación de los integrantes de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que lo amenazaban con redolarizar la economía y así evitar cualquier posibilidad de tener una política económica autónoma.
Fuente: Télam