En escena entra ahora Rodolfo Usuna, propietario del número telefónico desde el que se hicieron más de 900 llamadas a Nuñez Carmona, Vandenbroele y Renswick Brenner, en días decisivos de un caso que conmociona a nivel político y social.
El apuntado es un hombre que solía presentarse como concuñado del Vicepresidente, pero en realidad tiene esa filiación con el hermano menor del funcionario kirchnerista. De todos modos conoce a Boudou desde hace 40 años y trabajó con él en la firma de recolección de basura Venturino.
En la resolución de 333 páginas en la que procesó al ex ministro de Economía, Lijo dejó en claro el rol protagónico del teléfono móvil marplatense que -cuenta el diario La Nación- está registrado a nombre de la empresa Sin Fronteras SRL, cuyos accionistas son Usana y Rosana Venturino, cuñada del hermano menor de Boudou.
"Es posible presumir que ese abonado telefónico era utilizado por el propio Amado Boudou o, en su defecto, por alguien de su entorno directo designado por él", concluyó el magistrado.
El juez Lijo también tiene la mira puesta en la compañía mencionada: quiere determinar quién está detrás de la sociedad a la que se dirigieron decenas de llamadas en momentos clave de la venta de Ciccone.
Para despejar la incógnita, el magistrado pidió información a las empresas de telefonía con la intención de determinar cuáles son los números registrados por Sin Fronteras SRL y cruzarlos con los teléfonos del vicepresidente y sus allegados: su novia, Agustina Kämpfer; su secretario Eduardo Romano; y Núñez Carmona, Vandenbroele, Nicolás Ciccone y su yerno Guillermo Reinwick.
Fuente: infobae.com
