En este sentido, Hedman consideró que Catamarca cuenta “con muy buenas perspectivas para desarrollar la actividad, no sólo en cuanto a la producción de miel sino también de polen y propóleos como lo hace Santiago del Estero, ya que sus condiciones similares en buena parte del territorio por lo que podría obtener un polen de la misma calidad lo cual agregaría más rentabilidad a la colmena”.
La visita de la funcionaria se enmarca en el pedido de apoyo técnico efectuado a la Nación por la gobernadora Lucía Corpacci para mejorar las condiciones de vida del medio rural, caracterizado en muchas zonas de la provincia por la pobreza y la desocupación.
“Nos interesa trabajar en las zonas rurales donde todavía hay pobreza. La apicultura es una herramienta, un tipo de producción que puede llegar a mucha gente con baja inversión y con la posibilidad que el productor no necesita ser dueño de la tierra”, recalcó la coordinadora nacional.
Y añadió que “Catamarca tiene zonas fito-geográficas que son óptimas para el desarrollo de la apicultura. Tiene muchas especies de bosques nativos como el algarrobo, el mistol, la jarilla y muchas otras que le dan muy buenas perspectivas”.
En una visita de tres días, la funcionaria recorrió junto con técnicos provinciales zonas productivas del Este, del Oeste y del Valle Central para conocer de primera mano la realidad de los productores locales. La idea es formar una red de técnicos que abarque a todo el territorio provincial para lograr el desarrollo de la actividad.
Consultada acerca de las posibilidades de comercialización de la miel y otros subproductos a partir de los colmenares ubicados en el territorio, Hedman estimó que “por una cuestión de escala, a mediano plazo la producción podría insertarse en el medio local, ya que para exportar hay que lograr volúmenes importantes, lo cual es un objetivo a largo plazo”.
