Los módulos consisten básicamente en dos equipos, ambos realizados en acero inoxidable en sus partes principales: una paila a gas, con paletas accionadas eléctricamente, y una micro-pulpadora con capacidad para procesar cien kilos de fruta por hora.
“Es importante destacar dos cosas: que el gobierno compró estos módulos a un fabricante local, que trabaja en el departamento Andalgalá y al mismo tiempo es proveedor de la Minería, lo cual es significativo porque no estamos sacando la plata afuera de la provincia. Y por otro lado, que están destinados a grupos de elaboradores de dulces de diferentes tipos que tienen cantidades a veces mínimas de fruta para procesar. Y ahora van a tener un ahorro de trabajo considerable en el proceso de elaboración ganando además en tecnología para su proceso”, explicó el secretario Eduardo Toledo. “Hay que tener en cuenta que las buenas prácticas de manufactura recomiendan que ya no se utiliza la vieja paila de cobre sino que todo el proceso debe hacerse con acero inoxidable”, agregó.
El funcionario también explicó que los primeros grupos que serán beneficiados con la entrega de este equipamiento están ubicados en Capayán, Fray Mamerto Esquiú, Andalgalá, Norte Chico de Belén, Manantiales (Santa Rosa) y otros puntos de la provincia, pero aclaró que la intención del Ministerio de Producción “es cubrir todos los pueblos del territorio en que hay producción de dulces, lo cual es lo mismo que decir toda la provincia”.
“El objetivo a corto plazo es beneficiar a diez grupos de dulceros de en el que están involucrados aproximadamente siete familias en cada uno, con lo cual este proyecto impacta de manera directa en la economía de unas 70 familias, a las que vamos a invitar para que participen en la Expo-Productiva que hará el Ministerio de Producción en septiembre próximo", apuntó Rocío Leiva, cuya dirección está encargada de ejecutar el proyecto a campo.
Este proyecto de incorporación de tecnología a la producción agro-alimentaria se integra a un programa de capacitación sobre Buenas Prácticas de Elaboración que se dicta desde la Dirección de Agroindustria desde el año 2013, el cual se complementa con asistencia técnica en packaging y comercialización.
El equipamiento fue adquirido en parte, con financiamiento proveniente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentos de la Nación, y el resto con fondos provinciales.
En cuanto al fabricante, se trata de Mario Romero, propietario de un taller metálico ubicado en Andalgalá que registra antecedentes como proveedor de servicios a las empresas mineras. “Los trabajos fueron realizados en soldadura de acero inoxidable ya que así lo exigen las normas técnicas para la elaboración de dulces”, indicó el proveedor, que entregó los tres primeros módulos de un total de diez que se comprometió fabricar hasta septiembre.
En la jornada de hoy, los equipos fueron sometidos a una prueba de funcionamiento en distintos aspectos técnicos para comprobar la efectividad del proceso. Al acto asistieron los directores de Agricultura, Guillermo Rosales, de Ganadería Daniel Zelarayán y de Extensión Rural Miguel Soria, además de Agrónomos de Zona y público en general.