El interés empresarial para idear este proyecto “está apoyado en el corrimiento de la frontera agrícola que ha impulsado la ganadería hacia zonas marginales, pero se convierte hoy en una gran oportunidad que estaría generando un nuevo polo productivo a partir de la puesta en valor de tierras que aún no han tenido este destino”, consideró Carrizo.
Cuenca láctea
El proyecto pretende también incorporar la producción de pasturas en colonias con superficie cultivable bajo riego, con el objetivo de apoyar la producción lechera en esa zona del Este catamarqueño donde se instalarían los nuevos tambos, conformando una importante cuenca láctea que resolvería la escases de volumen en la zona.
Por otra parte, el director de Ganadería explicó que este proyecto empresarial “generaría una excelente oportunidad de trabajo o de negocio para los productores locales, ya que la lechería –que es muy exigente en términos nutricionales- sería la ocasión para pensar en la producción de forrajes para proveer a las empresas lácteas”.
El funcionario sostuvo que poder instalar la lechería en Catamarca “no es tan sólo una oportunidad de negocio, sino también generar el ámbito para que los productores de forrajes puedan tener su oportunidad con servicios, la provisión de insumos y maquinarias, es decir, genera todo lo que le hace falta a un circuito productivo para funcionar”.
El proyecto ahora será sometido al respectivo análisis técnico para luego evaluar la posibilidad de financiamiento y considerar cuestiones de logística para ser apoyado de manera sólida en una cooperación integrada de servicios. Se calcula que en no menos de 18 meses se definiría la propuesta sobre temas referidos a inversión, cantidad de hectáreas y productores involucrados.
En la reunión participaron los subsecretarios de Agricultura y Ganadería, Horacio Ruiz; de Industria y Comercio, Silvia Bertoli y de Promoción de Inversiones, Ana Rebellato y los directores de Ganadería, Juan Carrizo y de Extensión Rural, Gustavo Roldán.