Si bien todavía no hay una fecha definitiva para determinar el inicio de actividades de la deshidratadora, el secretario de Producción de Los Altos Adrián Marcial confirmó que “en 15 días va a llegar el resto de la maquinaria que falta para armarla y ponerla operativa”, puesto que en estos días se armó “un tercio” de la misma que corresponden a 14 metros de la línea de producción. No obstante, de acuerdo con los tiempos estipulados por la empresa fabricante, “a mediados de octubre estaría armada completamente la línea de deshidratado, teniendo en cuenta que están faltando 28 metros de horno, más las líneas de pre y post-deshidratado”, indicó.
Consultado acerca de cómo va a ser la provisión de materia prima que demandará el horno, Marcial reconoció que se trata de “un desafío”. El funcionario comentó que está previsto comenzar a trabajar con unas 70 hectáreas de superficie, y que se firmó un convenio con productores para proveerlos de semillas, herbicidas y combustible para la labranza. De estos insumos, los dos primeros serán devueltos con el mecanismo de “descuento a cosecha”, y para el combustible el convenio contempla un sistema de premios que beneficiará a aquellos productores que obtengan mayores rendimientos por superficie sembrada.
{adr}Un punto importante para el funcionamiento rentable de la maquinaria es lograr la continuidad y la cantidad de materia verde que se necesita, teniendo en cuenta que se trata de un horno que tiene una importante capacidad para disecar. El horno utiliza unos 70 kilos de leña por hora, que para el tipo de maquinaria de que se trata es un consumo prácticamente ínfimo, puesto que la mayoría de los deshidratadores existentes en el mercado consumen alrededor de 700 kilos por hora.
Dentro de las especies que se están planificando utilizar para la primera etapa, se incluye al perejil, las acelgas, y espinacas, que servirán para probar y poner a punto la maquinaria en cuanto a la temperatura, volúmenes y tiempo. “Esto dará lugar a incorporar más adelante a otros cultivos como la cebolla, de la que ya se están haciendo ensayos”, explicó Marcial.
La utilización de la maquinaria por los productores se hizo en el marco de un proceso de reconversión productiva a través del Programa Manos a la Obra, en el que intervienen el Área de Producción del municipio, el Ministerio de Producción y Desarrollo de la provincia y la Secretaría de Trabajo de la Nación, mientras que los productores involucrados en este mecanismo son en su mayoría ex tabacaleros de la Cooperativa La Santarroseña que, debido al actual proceso de achicamiento del mercado del tabaco, están mudándose a otras actividades agropecuarias rentables. Esta actividad también está enmarcada en un proyecto integral de desarrollo para la zona, que trabajan conjuntamente las mencionadas instituciones.