El objetivo del evento consistió en generar un espacio de difusión e intercambio de las actividades desarrolladas en torno a la producción de este cultivo. Se presentaron diversas temáticas relacionadas al aporte de los cultivos andinos a la seguridad alimentaria, a la articulación interinstitucional, a la nutrición y panificación de la quínoa, a su valor nutricional, a su relación con la identidad y a distintas experiencias asociadas a la reintroducción de ese cultivo. Luego se realizó una presentación y degustación de diversos platos elaborados a base de quínoa.
Grano sagrado
La quínoa, el grano de oro como lo llamaban los pueblos originarios, se sembraba desde tiempos precolombinos y conformaba un alimento fundamental en la dieta de la población. Sin embargo, gradualmente se fue dejando de cultivar hasta desaparecer por completo.
En lo que respecta a la provincia de Catamarca, el cultivo de la quínoa permaneció en la memoria popular y miembros de la localidad Laguna Blanca quienes propusieron su reintroducción. Es por ello que a partir del año 2.004, se inició el proceso de revalorización y siembra de la quínoa desde el Programa Pro Huerta de INTA, sumándose a esta iniciativa instituciones estatales y de la sociedad civil.
A partir de este trabajo articulado se conformó la Red de Desarrollo Económico y Social para el Territorio de la Jurisdicción de Termas de Villa Vil, departamento Belén, desde la cual se realizaron actividades de extensión e investigación enmarcadas en el respeto hacia las comunidades de altura. De esta manera, se logró integrar lo productivo a la valoración y el rescate de tradiciones culturales y saberes populares.
El proceso de reintroducción de la quínoa se inició en el Municipio de Villa Vil, extendiéndose, luego, a otros departamentos del oeste de Catamarca. Actualmente, superó esa frontera y está llegando a otras zonas de la provincia.