Quieren mano de obra catamarqueña en las cosechas olivícolas

El 75 por ciento de los trabajadores que levantaron la última cosecha olivícola no eran catamarqueños, y en su mayoría provenían de las provincias del NOA, especialmente de Santiago del Estero. La cifra fue dada a conocer el miércoles, durante la reunión de la multisectorial del sector, en la que se propuso iniciar acciones para que este número se revierta.
Juárez hizo referencia, entre los inconvenientes para captar cosecheros locales, a que no hay un buen sistema de transporte que los deposite en los emprendimientos.
“Es un tema que ya hemos planteado y no tiene hasta ahora solución. Por ejemplo, la gente de la Capital que quiere trabajar no tiene en qué ir hasta los campos”, recordó.
“Tenemos que trabajar para que el impacto económico y productivo que genera el olivo quede en Catamarca, y la gente tenga pertenencia al sistema productivo”, agregó.
La reunión del miércoles sirvió para comenzar a preparar la próxima campaña. Puntualmente, se analizó el aspecto de la seguridad, y para ello fueron convocados comisarios de los departamentos en donde hay emprendimientos olivícolas.
Además de Juárez, participaron del encuentro la subsecretaria de Promoción de Inversiones, Fabiola Garrot, el director de Inspección Laboral, Eduardo Tapia, el delegado de UATRE, Ramón Ferreira, y por parte de ASOLCAT (sector empresario), Bibiana Marabini.
“Lo que se hizo fue analizar los aspectos positivos y negativos que tuvo la última cosecha, y sobre todo poner énfasis en el tema seguridad dentro de los campos y fuera, por la gran afluencia de gente que viene de otro lado”, mencionó Juárez.
“Nos preocupaba puntualmente la cantidad de gente que está entrando, que se está quedando los fines de semana, y que genera disturbios en los pueblos”, dijo, y agregó que la Policía ofreció ser parte de las comitivas de fiscalización que se hacen al comienzo de cada cosecha, para reforzar aspectos preventivos y de seguridad.