El virus H1N1 fue identificado por primera vez en humanos en abril del 2009, pero la investigación genética sugirió posteriormente que en realidad había circulado por al menos una década y probablemente mucho más en cerdos.
"Este pandémico (virus) H1N1 tiene esta mutación que le permite replicarse tan bien en humanos", escribió Yoshihiro Kawaoka, de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de Wisconsin-Madison y la Universidad de Tokio, coautor del documento.
"Esto nos entrega otro marcador para ayudar a predecir la posibilidad de futuras gripes pandémicas" , agregó.
Habitualmente, un virus de gripe necesita dos aminoácidos, lisina y asparagina, en lugares específicos de su estructura antes de poder saltar de los animales a las personas y multiplicarse eficientemente en células humanas.
Sin embargo, el H1N1 era un misterio para los científicos, ya que no había podido encontrar aminoácidos en esas dos ubicaciones.
En un experimento con ratones, Kawaoka y sus colegas descubrieron que el aminoácido lisina se encontraba en unaposición completamente diferente, pero que permitía al virus ser igualmente efectivo en adaptarse a células humanas.
La Organización Mundial de la Salud dijo a inicios de junio que la pandemia del H1N1 no había pasado todavía, pese a que su actividad más intensa fue superada en gran parte del planeta.
Los niños y personas con condiciones subyacentes que debilitan el sistema inmune como asma, diabetes, enfermedad coronaria y embarazo fueron y son los más afectados por la enfermedad.
El estudio puede hallarse en: http://dx.plos.org/10.1371/journal.ppat.1001034
Fuente: Reuters