(DIARIOC, 08/11/2010) Cuando este insecto pica a un perro infectado con el parasito que causa la leishmaniasis, al tomar su sangre también lo ingiere. La próxima vez que pique a otro perro o persona sana, el parasito pasará a ellos, infectándolos con la enfermedad.
En las personas, la leishmaniasis visceral afecta al bazo, hígado, medula ósea y otros órganos. Es grave porque afecta a las defensas que tenemos para enfrentar las enfermedades.
Si tiene algunos de estos síntomas:
Fiebre prolongada
Aumento de tamaño del abdomen
Perdida de apetito
Disminución de peso
Tos seca
Diarrea
Vómitos
Como evitarlo
Para cuidarnos de la picadura de este insecto, se debe usar mangas y pantalones largos al permanecer al aire libre, usar repelentes, evitar estar al aire libre en el amanecer o atardecer (horas de mayor actividad del insecto), usar espirales o tabletas, colocar telas mosquiteras en puertas y ventanas, mantener el patio ordenado y desmalezado, alejar gallineros, chiqueros y cuchas de las viviendas, ya que en estos lugares se refugia el insecto. Los perros deben dormir fuera de las casas.
Si tiene alguna de estos síntomas concurrir inmediatamente al centro de salud más cercano a su domicilio. Cabe recordar, que en las personas la leishmaniasis visceral tiene cura si el tratamiento es inmediato.