Desde la Dirección de Cultura, Humberto Ayuza explicó que la renovación del mural tiene que ver con parte de todo un proyecto, “es un planteo que estamos haciendo para la creación de la escuela de Bellas Artes Municipal, que está proyectada para que se dé acá en el Centro Cultural Yokavil. Por eso se ha renovado este mural, el trabajo está terminándose, a cargo de la Señorita Natalia Medrano, quien está concluyendo su licenciatura en Arte en Buenos Aires”, detalló.
“Nos planteamos básicamente un mural que sea representativo, donde se puede observar un trabajo muy bien estudiado en todo lo que hace a un proceso histórico, social, cultural, donde al mirar las imágenes nos podamos sentir identificados dentro de lo que fue y es Santa María. Presentamos el boceto y el Intendente Jorge Andersch apoyó totalmente esta obra”, explicó Ayuza.
El Director de Cultura también comentó que desde el área a su cargo hay otra propuesta que tiene que ver con la recuperación del algarrobo que tiene un gran valor afectivo y de importancia para todos los santamarianos, más aún para los que han estudiado en este edificio que es la vieja escuela.
En el lugar, también se acondicionó un sector para la construcción de la sala de música Margarita Palacios que es parte también del proyecto de la creación de la escuela de Bellas Artes.
Por su parte, Natalia Medrano fue la artista autora de la obra quien comentó que la idea de esta escena es contar un poco a través de personajes representativos, que se encuentran en una sucesión de personajes que van hacia un determinado lugar. “El arriero da una dirección, los trabajadores también tiene importancia. Están los alumnos porque este lugar tiene que ver con el pasado reciente de la educación y la figura indígena esta como dando una base, es la representatividad de la base y la raíz que se entremezcla con iconografías santamarianas. Y en el sector superior los colores de los cerros, todo lo que tiene que ver con estas montañas y paisajes”, detalló la artista.
Para realizar esta obra se utilizaron esmaltes sintéticos porque el mural está expuesto a la intemperie, la mitad del día le da el sol intenso y con látex no tiene la misma duración. Con este material se logró determinar colores muy vivos además de asegurar mayor tiempo de vida a la pintura.