“Me llama la atención que de una bombucha de agua hagan una piñata. Este artículo ya había sido publicado en 2008”, señaló el académico.
En la víspera la agencia espacial estadounidense (Nasa), divulgó una información que publicó luego la revista Science, un estudio que redefine lo que los biólogos consideraban que eran los elementos necesarios para la vida: el carbono, el hidrógeno, el nitrógeno, el oxígeno, el fósforo y el azufre.
El análisis expresa el descubrimiento de una bacteria que no sólo vive en el arsénico, sino que además crece incorporando este elemento en las membranas celulares de su ADN.
El descubrimiento fue hecho por Felisa Wolfe-Simon, una investigadora en astrobiología de la agencia espacial estadounidense (Nasa) y científica de la escuela de exploración terrestre y espacial de la universidad del estado de Arizona (oeste).
“Creo que esta es una cortina de humo. Es muy importante el descubrimiento porque muestra una nueva bioquímica, pero no es nada nuevo. Se dio una noticia del tamaño de una piñata y resulta ser que no es más que una bombita de agua”, manifestó.