Claudio Maza, enólogo, indicó que "se hicieron los trabajos de mantenimiento y una vez finalizada la cosecha inmediatamente se comienza a trabajar para la próxima temporada".
"Una vez levantada la uva se comienza con pequeñas partidas porque la maduración todavía no está óptima y largaremos con variedades con menos calidad enológica, luego seguimos con el proceso de molienda y fermentación", explicó el profesional.
Asimismo, detalló que "de los 3 millones de kilos de uva cosechados se obtendrán unos 2.500 litros de vino de una calidad media y superior que serán destinados a Cafayate, donde se realizará el proceso del envasado del vino".
Para este año está prevista una ampliación del proyecto para poder envasar el vino en una bodega de Santa María, lo que le haría muy bien a la zona debido a que es una gran productora de vinos.
{adr}"El desafío del valle es grande y hay que ponerse de acuerdo todos los bodegueros para que salga un producto único que nos identifique en el exterior y en la Argentina", manifestó Maza.
Por último, graficó: "La variedad de moda es el tanac, lo fue el año pasado y este 2007 también, con un repunte bastante agresivo del torrontés, que es la variedad típica del valle con la cual hay que salir y mostrarse". (CAMPONOVA)
