El jugador, quien en las últimas semanas dijo haber superado los problemas por excesos de alcohol y de fiestas que redujeron su rendimiento futbolístico, ya había sido sorprendido la semana pasada por fotógrafos en diferentes celebraciones con bebidas alcohólicas en la mano.
El incidente de la madrugada de hoy se registró en una importante avenida de Río de Janeiro y no dejó víctimas ni eridos, pero sí algunos daños materiales.
Adriano, de 25 años y que reconoció que los problemas con el alcohol y con las fiestas afectaron su rendimiento en el Inter, se sometió en las últimas semanas a un intenso proceso de recuperación física y psicológica en el San Pablo. (Télam)