Para el partido entre Racing y Boca, 700 policías están abocados al control en las inmediaciones del estadio Juan Domingo Perón. En tanto, los otros 2000 efectivos custodian el límite entre Avellaneda y el sur de la ciudad autónoma de Buenos Aires y el partido de Lomas de Zamora.
El operativo, que comenzó a las 9.00, es coordinado por el ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, y organizado en forma física por el jefe de la Policía Bonaerense, Hugo Matzkin, junto al titular de Agencia de Prevención de Violencia en el Deporte (Aprevide), Luis Morales.
En principio, la policía bonaerense detuvo a 10 hinchas y vigilirá que ningún simpatizante ingrese al estadio con mensajes o disfraces alusivos a Independiente, tradicional rival de Racing, que está en zona de descenso y a un paso de perder la categoría por primera vez en su historia.
Debido al operativo policial, los planteles de Racing y Boca llegaron a las 19.00 al estadio para evitar cualquier tipo de inconvenientes.
Una vez finalizado el cotejo, la delegación de Boca Juniors debía ser escoltada por la policía bonaerense hasta el ingreso a Capital Federal.
Por su parte, la sede de Independiente, ubicada sobre avenida Mitre 470, a cinco cuadras de la casa de Racing, también está bajo un operativo especial con 10 agentes (reforzados con integrantes de Gendarmeria) y 3 carros de asalto, cubierta por vallados.
En ese lugar, los hinchas de Independiente dejaron carteles referidos al presente futbolístico del club: "En las buenas y en las malas, siempre estamos con vos, no con Cantero: chorro, sos de Racing".
En otra pancarta se podía leer: "Estoy con vos Rojo, no con Cantero".
Fuente: Télam