Así que el duelo comenzó de manera muy pareja, con cada tenista conservando su saque.
De los dos el que arriesgó hasta el momento un poco más fue el escocés, quien conectó más tiros ganadores (7 contra 3) pero también cometió más errores no forzados (10 contra 2). El partido está 3-3.
Y como ocurre muchas veces llegaron dos quiebres consecutivos. El primero en dar el golpe fue Murray pero en el siguiente juego Ferrer arriesgó más que nunca y volvió a emparejar el encuentro.
Con los dos jugadores en un gran nivel, Murray tuvo dos break points en el 4-4 para poder desnivelar pero un Ferrer mucho más agresivo logró mantener su saque para adelantarse 5-4.
Los dos tenistas están sosteniendo largos peloteos desde la base y aunque todavía no terminó el primer set se puede afirmar que Djokovic tendrá un plus de ventaja en lo físico ya que cuenta con un día más de descanso.
En el décimo game, un Ferrer mucho más decidido fue por el saque de Murray, el escocés volvió a flaquear en un momento clave y el español se quedó con el primer parcial por 6-4.
En el comienzo del segundo set, Murray aprovechó una pequeña desconcentración de Ferrer para quebrarle el saque pero tal cual le ocurrió en el primer set, en el game siguiente lo quebraron.
Cuando Murray tiene que salir a ’liquidar’ a su rival no lo hace y esa es la gran ventaja que le llevan Federer y Nadal.
Ferrer es un gran luchador y en el segundo juego recuperó el quiebre para volver a emparejar el encuentro.
El nivel de juego es superlativo, con los dos tenistas golpeando y corriendo en cada punto como si fuera el último. Los peloteos son largos y de gran intensidad.
Ferrer desperdicia tres chances de break para ponerse 4-2. Murray está desconcertado ante la movilidad del español pero se mantiene en juego.
A medida que avanza el set crece la tensión y los nervios y también aumentan los errores no forzados. Murray ya suma 13 y Ferrer 8. En todo el primer set, el británico había cometido 16 y el español 6.
Ferrer tuvo su gran chance de llevarse el segundo set cuando Murray sacó 4-5 y tuvo un set point pero el escocés lo salvó con un gran saque.
En el siguiente juego, Murray aprovechó el efecto psicológico del set point perdido, le quebró al español y se colocó 6-5 arriba.
Pero volvió a fallar en el cierre, perdió su saque y tuvo que esperar hasta el tie break para quedarse con el segundo set.
El tie break fue lo peor que jugó Ferrer hasta el momento, con muchos errores y una pérdida consecutiva de 6 puntos para finalmente caer por 7-2.
Dos sets, dos horas de partido. Y Djokovic descansando para la final mientras Ferrer y Murray libran una verdadera batalla.
En el 1-1, Ferrer desperdicia dos bolas para quebrar y en el siguiente juego Murray aprovecha su oportunidad, le gana el servicio y se adelanta 3-1. El partido es muy emocionante.
Otro quiebre de Murray. Es su momento. Aprovecha todas las oportunidades y se adelanta 5-1.
Una clara muestra de que todo está a su favor es que luego de desperdiciar dos sets point, consiguió remontar cuatro break points antes de cerrar el parcial por 6-1.
En todo el set, Ferrer desperdició siete chances de quiebre y lo terminó pagando muy caro. Le había pasado en el segundo set y le volvió a ocurrir ahora.
Gran comienzo de Murray en el cuarto set. Quiebre de saque y nivel muy sólido ante un Ferrer, que sintió el impacto de perder el tercer parcial.
Murray no termina de someterlo a Ferrer y el español lucha con uñas y dientes. Recupera el quiebre y se pone 2-2.
En todo el partido, Ferrer ganó cuatro de las 17 oportunidades de quiebre que tuvo. Murray se quedó con 6 de 10. Es una de las claves de la victoria parcial del británico.
Ferrer dio la gran sorpresa de los cuartos de final al eliminar a su compatriota Rafael Nadal, número uno del mundo, por 6-4, 6-2 y 6-3, mientras que Murray superó al ucraniano Alex Dolgopolov por 7-5, 6-3, 6-7 (3-7) y 6-3.
El serbio venció al suizo por 7-6 (7-3), 7-5 y 6-4 y avanzó a la final, donde espera al ganador del duelo que ahora están disputando el español David Ferrer y el escocés Andy Murray.
El serbio Novak Djokovic, número tres del ranking mundial, jugó ayer quizás el mejor partido de su vida para derrotar a Federer, dos del mundo, y así clasificarse para la final, donde buscará su segundo título en el abierto de Australia, que ya ganó en 2008.
Precisamente ese fue el último torneo de Grand Slam en el que no jugaron en la final ni Federer ni el español Rafael Nadal, número uno del mundo, algo que se repetirá en esta edición.
En aquella oportunidad, Djokovic le ganó en la final al francés Jo Wilfried Tsonga y en la semifinal había vencido justamente a Federer.
Entre las mujeres, la belga Kim Clijsters y la china Na Li jugarán mañana la final tras dejar en el camino a la danesa Caroline Wozniacki y la rusa Vera Zvonareva, respectivamente.
Clijsters, tercera favorita, eliminó a Zvonareva, segunda por un doble 6-3.
En tanto, Na Li derrotó a Wozniacki por 3-6, 7-5 y 6-3.
Por Gustavo Lenti(Telam)
