Luego de algunos meses de reuniones con productores y artesanos catamarqueños y tras la firma del convenio de Cooperación entre la Casa de Catamarca y la Cooperativa “Huayra Huasi”, la idea de crear un local de venta de productos típicos fue tomando cuerpo cuando las adhesiones y el apoyo del sector productivo y artesanal de la provincia de Catamarca posibilitó la apertura de nuevos mercados comerciales en la Capital de la Argentina. La creación de este nuevo emprendimiento laboral en la Casa de Catamarca tiene dos intereses fundamentales. Por una parte, la habilitación del local estimula con sus productos la promoción turística y cultural de nuestra provincia, al tiempo que, por otra parte, acrecienta los circuitos de comercialización de aquellos productores y artesanos que les resulta muy difícil insertarse en un mercado tan grande como el de Buenos Aires.
{adr}El evento comenzó con las cálidas palabras de bienvenida del Subsecretario de Casa de Catamarca, el Dr. Juan Xavier Vehils Ruiz, a las que les siguieron las del Presidente de la Cooperativa “Huayra Huasi”, el Sr. Adrián Argañaraz, ante una nutrida concurrencia de residentes catamarqueños en Buenos Aires y público en general. Acto seguido se oficializó la inauguración del local con el consabido corte de cintas entre el subsecretario y el presidente, siendo éste uno de los momentos más emotivos de la noche.
Luego de la entrega de regalos a las autoridades presentes comenzaron las degustaciones de nuestras típicas empanadas, acompañadas por vinos finos y pisco catamarqueños. Al momento de los dulces aparecieron las conocidísimas nueces confitadas y los dulces caseros. El resto de la fiesta fue el baile que se organizó espontáneamente, teniendo como telón de fondo las actuaciones en vivo de los catamarqueños de “Las Voces de la Salamanca” y Julio Gerván. La fiesta continuó hasta la medianoche con una gran cantidad de concurrentes que visitaron el local y compraron artesanías, dulces y vinos.
Cooperativa “Huayra Huasi”
Por: SRA. DE CORVALíN el 14-09-2006 a las 16:13