En esas circunstancias, Raúl Alejandro Salín, de 18 años, iba caminando hacia la casa de su abuela, cuando fue interceptado por Sosa, quien le aplicó un golpe de puño que lo hizo caer al suelo.
El agresor siguió golpeando a la víctima, e incluso tomó una botella con la que le dio en el brazo.
A causa del incidente, Salín terminó con una fractura en el maxilar inferior derecho, otro en el peroné izquierdo, una posible fractura de órbita ocular izquierda, además de un hematoma en el rostro.
Sosa está imputado por lesiones graves.