Vacazur, concubino de una de las hijas de Titos, salió de la casa y se acercó a donde estaban los obreros y les preguntó por Rodríguez, que en ese instante no estaba. Entonces les advirtió que lo mataría y volvió adentro.
Posteriormente, cuando Rodríguez regresó y mientras estaba de espaldas a la casa, desde atrás llegó Vacazur portando un palo de “viscote”, de 90 centímetros de largo, 10 de diámetro y unos 900 gramos de peso, con el que golpeó a Rodríguez en la cabeza y en la espalda.
El obrero fue hospitalizado con un traumatismo encéfalo craneal, con factura de cráneo, hematomas y hemorragia aguda, que le provocaron la muerte diez días después.